jueves, 18 de octubre de 2012

Sobre "Big Threes" y "Big Fours"

Los fichajes, hace un par de temporadas, de LeBron James y Chris Bosh por Miami Heat levantaron mucha polvareda mediática... Incluso mitos del calibre de Michael Jordan, Magic Johnson o Charles Barkley hicieron declaraciones y dieron su opinión al respecto. Ahora, con los fichajes de Dwight Howard y Steve Nash por Los Angeles Lakers la polémica se ha reavivado.

Son muchos los medios de comunicación que quieren vender la idea de que en la NBA actual las estrellas se confabulan para formar "Big Threes" o incluso "Big Fours" con el objetivo de conseguir anillos de campeón que en solitario les serían mucho más difíciles de alcanzar. Lo cierto es que lo que realmente encendió la mecha fue el auténtico culebrón que se montó LeBron aquel verano, con el absurdo "si, no, si, no, si, no..." a los Cavaliers. Yo nunca he criticado que fichara por Miami ni que fuera a juntarse allí con Wade y Bosh (en esta vida cada uno es libre de hacer lo que le de la real gana... ¡Faltaría más!), pero sí que critiqué la forma de tratar a los Cavs, de convertirlo todo en una atracción de feria y de acabar el culebrón en un reality show de televisión, lo cual me pareció lamentable. Creo que eso condicionó un poco esta dudosa imagen de los "Big Threes" y los "Big Fours" a los que hacemos referencia.

Pero dejemos las invenciones mediáticas para la prensa (o al menos para ciertos sectores de la prensa) y vamos a comprobar como los "Big Threes", e incluso algún "Big Four", han existido siempre a lo largo de la historia de la NBA.

No vamos a tener en cuenta a grandes tríos que fueron forjados desde la misma raíz, motivo de buenas elecciones en el draft. Así, "team-ups" tan ilustres como los formados por Bob Cousy, Bill Russell y Sam Jones en los Celtics de finales de los 50/principios de los 60, Kareem Abdul-Jabbar, Magic Johnson y James Worthy en los Lakers de los 80 o Larry Bird, Robert Parish y Kevin McHale en los Celtics de la misma época, quedan fuera de consideración, ciñéndonos exclusivamente a los "team-ups", por decirlo de algún modo, fichados a golpe de talonario (o gracias a un traspaso maestro).

Podría considerarse como el primer gran "Big Three" forjado de este modo el formado por Jerry West, Elgin Baylor y Wilt Chamberlain en los Lakers de finales de los 60/principios de los 70, cuando los de Los Angeles se hicieron con los servicios de este último, en verano de 1968, vía Sixers. Además, fueron tristemente célebres por, a pesar de todas las expectativas creadas, perder las finales de la NBA de 1969 (frente a los Boston Celtics) y 1970 (frente a los New York Knicks) de forma consecutiva y absolutamente dramática, a pesar de ser los favoritos en cada una de ellas. Al año siguiente perdieron las finales de la conferencia Oeste ante los Milwaukee Bucks del pujante Kareem Abdul-Jabbar (todavía Lew Alcindor) y no fue hasta 1972 cuando Chamberlain y West lograron, al fin, el preciado anillo de campeón para los Lakers; pero ya con Baylor retirado (forzado por las lesiones) y con el amargo regusto de haber disputado esas finales contra unos desolados Knicks, sin Wilis Reed y Dave DeBusschere, muy mermados por las lesiones.

Los que sí consiguieron un éxito rotundo e inmediato fueron los Philadelphia 76ers en la temporada 1982-83, cuando se hicieron con los servicios del por aquel entonces mejor jugador de baloncesto el mundo, Moses Malone, que vino a formar un "team-up" sublime con Julius Erving y el emergente Andrew Toney, que apenas acababa de ser apodado "El estrangulador de Boston" por su espectacular actuación en los playoffs de la temporada anterior. Juntos, llevaron a los Sixers a lograr la mejor marca de la historia de los playoffs,12-1 (solo superada por los Lakers del 2001, aunque con el mismo número de derrotas), barriendo a los Lakers en las finales. Con este equipo ocurrió justo lo contrario que con los Lakers de West, Baylor y Chamberlain, puesto que comenzaron de forma arrolladora para ir de más a menos en los siguientes años, especialmente por culpa de varias lesiones inoportunas y la elevada edad de algunos de sus componentes. Andrew Toney pronto comenzó a sufrir problemas físicos que le impidieron volver a su mejor nivel y terminaron retirándolo de las canchas prematuramente. Aunque pronto llegó un rookie llamado Charles Barkley que fue sustituyendo progresivamente a Toney en el "Big Three" del equipo, les faltó banquillo, piernas jóvenes y un poco de suerte (Moses Malone se perdió el final de la temporada 1985-86, playoffs incluidos) y el equipo terminó rompiendose definitivamente en verano del 86 con el traspaso de Malone a los Bullets. Un año después, Julius Erving colgaría las botas.

Durante la segunda mitad de los 90 y tras haber sido campeones de la NBA en 1994 y 95 (con Hakeem Olajuwon como máxima estrella), los Houston Rockets trataron de volver a asaltar el anillo fichando nada más y nada menos que a Charles Barkley, que vino a unirse a Olajuwon y Clyde Drexler (que ya estuvo presente en el anillo de 1995) para formar un auténtico trío de ases. No lo lograron, puesto que aparte de ser un equipo ya muy veterano, en aquellos momentos la cosa estaba muy dura, con equipos como los Bulls de la segunda era Jordan, los Jazz de Stockton & Malone o los Sonics de Kemp & Payton, pero siempre estuvieron allí, dejando grandes momentos de baloncesto. En 1997 disputaron unas finales de conferencia muy encarnizadas con los Utah Jazz, quedando a un paso de las finales absolutas tras ser eliminados por aquel legendario buzzer beater de John Stockton en el último segundo del 6º partido. En 1998 las lesiones les masacraron y Drexler terminó retirándose del baloncesto profesional. A la temporada siguiente trataron de repetir la misma fórmula fichando a Scottie Pippen, pero este no encajó en aquel equipo hiperveterano y un año después puso rumbo a los Blazers.

En la temporada 2002-03, a los implacables Lakers de Shaquille O'Neal y Kobe Bryant se les acabó la racha triunfal que habían mantenido durante las tres temporadas anteriores (ganando el anillo en 2000, 01 y 02). El estilo de Phil Jackson, basado en concentrar casi todo el peso ofensivo del equipo en sus dos máximas estrellas, mientras los rodeaba de especialistas varios en la misma línea de lo que ya había sucedido en los Bulls de la era Jordan, tocó fondo y el equipo poseía muy poquitos mimbres válidos aparte de los mencionados Kobe & Shaq. Perdieron en segunda ronda frente a los Spurs. De cara a la siguiente temporada, trataron de dar un golpe de efecto fichando a dos veteranísimos de lujo como eran Karl Malone y Gary Payton; ya de vuelta de todo, pero con hambre de anillo. Las expectativas eran muy altas y aquellos Lakers del "Big Four" se plantaron en la final de la NBA, como máximos favoritos ante los Detroit Pistons de Billups, Hamilton y los Wallace. En dichas finales, explotó la bomba de relojería que tan a raya había logrado mantener Phil Jackson (o al menos eso parecía). Malone se lesionó, Payton no terminó nunca de encajar en ese equipo y Shaq y Kobe tuvieron su choque de egos definitivo (Kobe también tuvo sus más y sus menos con Malone). Perdieron las finales 4-1 y como consecuencia de todo ello, Shaq terminó traspasado, Payton también, Malone se retiró y comenzó la era de Kobe en solitario en L.A.

En verano del 2007, Kevin Garnett dejaba el que había sido siempre su equipo hasta entonces, los Minnesota Timberwolves y llegaba, vía traspaso, a los Boston Celtics a cambio de, literalmente, medio equipo. Con él, también llegó al equipo de Massachusetts Ray Allen, procedente, también vía traspaso, de los Sonics de Seattle. Los Celtics de Paul Pierce, Ray Allen y Kevin Garnett cuajaron un éxito inmediato parecido al de los Sixers de 1983, ganando ese mismo año el anillo y produciendo un gran impacto en la liga. Pero al igual que ocurrió con los Sixers de Erving, Malone y Toney, lo siguieron intentando sin éxito. En las últimas temporadas han seguido practicado un gran baloncesto, pero siempre se han quedado a las puertas frente a equipos más jóvenes y poderosos físicamente. Las lesiones tampoco les han respetado siempre y, al igual que ocurrió en aquellos Sixers de los 80 con Toney y Barkley, Rajon Rondo ha ido ocupando progresivamente el lugar de un Ray Allen ya muy veterano en el "Big Three" del equipo. Este pasado verano, Allen fichó por los Heat, poniendo punto y final a este ya histórico "Big Three".

He dejado para el final un "Big Three" (o "Big Four", o no sé exactamente como llamarlo...) muy especial; me refiero a los New York Knicks de principios de los 70, paradigma de juego en equipo y tesón. En realidad los Knicks ya poseían una especie de "Big Three" desde 1968, cuando ficharon a Dave DeBusschere para añadirlo a sus dos principales estrellas, Willis Reed y Walt Frazier, lo cual les llevó a conseguir el anillo en 1970 ante los poderosos Lakers de Wilt Chamberlain, Elgin Baylor y Jerry West. Tras perder las finales del Este en 1971, los Knicks realizaron dos movimientos maestros durante ese verano, consiguiendo los servicios de Earl Monroe y Jerry Lucas. El veterano Lucas no ofrecía muchas dudas al respecto de su adaptación al juego de equipo de los Knicks, pero la cosa no estaba tan clara con el revolucionario juego de playground de "The Pearl" Monroe... Pero Earl se adaptó como un guante al equipo, ayudándolo a lograr nuevos éxitos a pesar de la acentuada veteranía de muchos de sus jugadores y de los problemas físicos varios que sufrieron durante esos años. En 1972 volvieron a las finales (de nuevo frente a los Lakers), pero las lesiones de Reed y DeBusschere no les dieron opción. Un año después, en 1973, la revancha sería servida, pudiendo contar los Knicks con todos sus mimbres, frente a unos Lakers tocados físicamente, en la que sería la última temporada en activo de Wilt Chamberlain. En 1974 el equipo se rompería definitivamente con las retiradas, al unísono, de Willis Reed, Dave DeBusschere y Jerry Lucas. Un equipo difícil de catalogar... ¿"Big Three", "Big Four" o "Big Five"?... Dudo mucho que les importara, puesto que este equipo fue el paradigma perfecto de harmonía, sacrificio en pos del equipo y juego sin individualidades.

¿Como continuará la historia del "Big Three" de Miami?

¿Como comenzará la historia del "Big Four" de los Lakers?

Pronto lo sabremos... La historia continúa.

13 comentarios:

Unknown dijo...

mo,entonces habria que poner en un pedestal a un tal bill walton.El solito se cargo a los sixers del dr j en las finales de 1977.hay que dar mas merito a ese anillo que los de Bird,Magic,Jordan,Duncan,etc.ellos tenian un EQUIPO alrededor,y los trail blazers del 77 no.pero estamos hablando de Walton.un autentico vendaval de juego y lo mas importante:FUNDAMENTOS.Mo,chekea algun partido de las finals y me contaras.

Unknown dijo...

ah,mo,y lo mas triste de todo es que salvo pau,no exista ningun center que tenga la mitad de fundamentos que los jabbar,walton,malone,hakeem,ewing.es decir: bote,finta,vision del juego,capacidad de liderazgo y mejora del equipo.o me vas a decir que howard es capaz de hacer un no-look pass en la zona como lo hacian walton o sabonis?.un saludo mo.y gracias por tu blog,se aprende muchisimo.

Jorge (alerotirador) dijo...

Gran repaso Mo a algunos de los mejores equipos de siempre.

Respecto de la polémica inicial que comentas sobre la formación de estos equipazos, estoy en la idea de que las estrellas deben ser capaces de ganar su anillo por si mismo como por ejemplo intentó Iverson en Philly.

Otra cosa es cuando esas estrellas son veteranas y buscan su última oportunidad: ejemplos de Garnett a Celtics, Malone a Lakers, o Nash ahora a Lakers también.

Como aficionado reconozco que es agradable ver jugar juntas a esas estrellas como si casi de un All Star se tratara cada uno de sus partidos, pero también la historia demuestra que no siempre la formación de estos equipazos es garantía de éxito: Miami hace dos años, los Lakers con Shaq, Malone, Kobe y Payton...

Veremos que sucede este año que apunta a una final Miami-Lakers con permiso de Oklahoma y Boston.

Saludos.

Mo Sweat dijo...

Saludos, Tito.

Totalmente de acuerdo contigo; ningún pívot actual, salvo Pau, puede hacer todas esas cosas que eran habituales en los Jabbar, Walton, Sabonis y cia.

Lo que comentas sobre Walton y sus Blazers, también podría valer para Rick Barry y sus Warriors apenas dos años antes. Sí, Barry contaba con algún compañero como Jamaal Wilkes, pero no era más de lo que tenía Walton con Mo Lucas, que por aquel entonces era un all-star.

Mo Sweat dijo...

Por cierto, muchas gracias por tus palabras... Yo también aprendo cosas con comentarios tan interesantes como los que acostumbráis a dejarme siempre en el blog.

Mo Sweat dijo...

Saludos, Jorge.

Sí, claro, veteranísimos de lujo que se unen al carro de equipos con aspiraciones siempre ha habido, como por ejemplo Nate Archibald en los Celtics de principios de los 80, Bob McAdoo en los Lakers de mediados de la misma década o muy recientemente Sheed Wallace y Shaq en los Celtics.

Yo también apuesto por una final Lakers-Heat.

costalgaraldals dijo...

Me parecería genial que los Thunders tumbaran todas las predicciones, que dejaran su sello entre franquicias de amiguetes en post del anillo.
Siendo sincero, no veo porque no va a ver una final Heats-Lakers, lo tienen todo ... ¿todo? Si logran conjuntar egos, si cada uno coje su rol y lo lleva con profesionalidad, sin envidias, sin disputas ... son imparables.
Te dejas un big-three ¡¡¡
Gus Johnson/Jack Sikma/Dennis Johnson del 78/79 ... Seattle se llevó el anillo como EQUIPO, 7 jugadores por encima de los 10 puntos de promedio por partido.

Anónimo dijo...

Maverik says,

Maravilloso post Mo, de esos q nos gustan, historia, mitos, leyendas, juego de equipo, fudamentos y hasta polémica jeje.

No sé a q viene lo de Walton, pq estamos halando de conjunción de estrellas y no líderes "solitarios". Pero es q encima, como muy bien dice Mo, el único q ha conseguido ganar un anillo con una panda de patanes ha sido Rick Barry. Wilkes era novato y hasta él mismo reconoce q todo lo hacía Rick Barry. En cuanto a Walton, una de mis debilidades, hay q decir q tenía a Mo Lucas, un all star. Pero por lo demás, Walton como Rusell, los mejores líderes de la historia del baloncesto, quizás no tan espectaculares o carismáticos como otros, pero ganadores natos.

Coincido plenamente con Jorge, alerotirador. Cuando so jóvenes, las estrellas deben luchar por ser líderes absolutos. Cuando son veteranos, es bonito q intenten ganar un anillo a base de tesón y sacrificio. Pienso en Oscar Robertson, Alonzo Mourning y tantos otros.

Ya para acabar: el Big Three de Allen, Garnet y Pierce sólo tiene un anillo pero por juego es el mejor equipo de los últimos años. Era bonito velros jugar: sacrificio, talento veterano (el Big Three) y físico joven (Rondo y Perkins), juego en equipo en estado puro. Era como ver un equipo de los 80. Con esto no estoy quitando méritos a los equipos q han vencido a los Celtics pero de verdad q ninguno de ellos me transmite las mitad de lo q me transmitia estos Celtics.

Saludos crakcs

Anónimo dijo...

Maverik says,

Ah y me olvidaba:

Costalgaraldals = mega-crack. ¡Esos Supersonics de finales de los 70! Un auténtico equipo en todos los sentidos. Desconozco su historia en cuanto a fichajes/drafts pero desde luego sí conozco la historia de DJ actuando de escolta antes de convertirse en el base de los Celtics...


Saludos

Costello dijo...

Esto no es fútbol que optas a ganar 8 titulos al año pero Lakers siempre están ahí y todos los grandes quieren jugar allí si se da la ocasión y se ven con opciones de ser titulares . Las grandes ciudades siempre tiran más , no es lo mismo ser un ídolo en Miami o NY que en Minneapolis , los sponsors pagan mejor si tienes más fans . Creo que tenemos Lakers y Miami para tiempo .
Chao

Mo Sweat dijo...

Saludos, Costas.

Como tu bien apuntas, aquel equipo de Seattle fue más un compendio de grandes jugadores de equipo, con varios de sus componentes por encima de los 10 puntos de media, que un Big Three al uso... Muy grandes.

Mo Sweat dijo...

Saludos, Mav.

¡¡Absolutamente de acuerdo con tu comentario sobre los Celtics!!

Yo, por ejemplo, en aquella última final Lakers-Celtics, iba con los primeros, especialmente por Pau, pero hubo momentos de la final en que mi corazón se situaba al lado de los Celtics... Por juego en equipo, por Ba-lon-ces-to.

Mo Sweat dijo...

Saludos, Costello.

Bueno, Miami creo que sí, pero Lakers me parece que no... Mira las edades, especialmente de Nash y Kobe. Pero por ahora vamos a ver qué nos deparan esta temporada...